Amonestaciones. Amarilla a Chenge por intercambiar impresiones con el árbitro; a Alberto II por una supuesta entrada y roja a Willy por propinar una patada después de que un contrario opinara sobre su coeficiente intelectual. Definitivamente se le olvidó tomar la medicación antes del partido.
Incidencias: 14º, Buena mañana en Amigó y banquillo de lujo con casi todo el equipo disponible.
Arbitro:
Viejo conocido de La Jarana de bigotes. Muy, muy, muy mal. Prepotente, impresentable y con manía persecutoria hacia el equipo azul. No se le pudo comentar nada, desvarió, sancionó con prevaricación e incluso advirtió a Josetxo que no iba a permitir que hiciéramos cambios si él pensaba que era para perder tiempo. Luego pitó el final en el minuto 32 de la segunda parte. Una absoluta vergüenza.
A buen seguro le fastidió más a él que al equipo del Temple que ganáramos el partido.
Comentario:
Muy bien La Jarana, sobre todo en la primera mitad. La suerte que otras veces ha sido esquiva para el equipo de la peña, esta vez apareció.
El partido empezó con La Jarana sin complejos ante el líder de la clasificación. Con llegada y buen trato del balón. Pronto el partido se puso de cara para los azules, cuando Willy tras pelear hasta la extenuación un balón, provocó que el defensa disparara a puerta y sorprendiera al portero del Temple. El gol de todas formas, se lo daremos a Willy por majo. Después, el equipo siguió con su marcha y de nuevo la fortuna se alió con La Jarana ya que un centro sin aparente peligro de Carlos P., aunque Denis pasaba por allí a molestar, lo remató también a puerta otro defensa del Temple. El gol también se lo daremos a Carlos por guapo.
En la segunda parte, el partido fue menos brillante, pero La Jarana supo mantener el tipo y su portería a cero. En cualquier caso, el Temple tampoco demostró nada.
Con esta victoria, el equipo se asegura prácticamente la categoría y lo mejor es el gran ambiente que reinó en el equipo. A sí da gusto.